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Las bolsas de plástico que afirman ser biodegradables todavía estaban intactas y podían llevar las compras tres años después de haber estado expuestas al medio ambiente natural, según un estudio.

La investigación probó por primera vez bolsas compostables, dos formas de bolsas biodegradables y bolsas de transporte convencionales después de una exposición a largo plazo al mar, el aire y la tierra. Ninguna de las bolsas se descompuso completamente en todos los ambientes.

La bolsa compostable parece haber tenido mejor suerte que la llamada bolsa biodegradable. La muestra de bolsa compostable había desaparecido completamente después de tres meses en el medio marino, pero los investigadores dicen que se necesita más trabajo para establecer cuáles son los productos de descomposición y para considerar las posibles consecuencias ambientales.

Después de tres años, las bolsas «biodegradables» que habían sido enterradas en el suelo y en el mar pudieron transportar las compras. La bolsa compostable estaba presente en el suelo 27 meses después de haber sido enterrada, pero cuando fue probada con la compra no pudo sostener ningún peso sin rasgarse.

Investigadores de la Unidad Internacional de Investigación de Desechos Marinos de la Universidad de Plymouth dicen que el estudio -publicado en la revista Environmental Science and Technology- plantea la cuestión de si se puede confiar en las formulaciones biodegradables para ofrecer una tasa de degradación suficientemente avanzada y, por lo tanto, una solución realista al problema de los desechos plásticos.

Imogen Napper, que dirigió el estudio, dijo: «Después de tres años, me sorprendió mucho que cualquiera de las bolsas pudiera contener una carga de compras. Para que las bolsas biodegradables pudieran hacer eso fue lo más sorprendente. Cuando ves algo etiquetado de esa manera, creo que automáticamente asumes que se degradará más rápidamente que las bolsas convencionales. Pero, después de tres años por lo menos, nuestra investigación muestra que podría no ser el caso».

Aproximadamente la mitad de los plásticos se desechan después de un solo uso y cantidades considerables terminan como basura.

A pesar de la introducción de cargos por bolsas de plástico en el Reino Unido, los supermercados siguen produciendo miles de millones cada año. Una encuesta realizada por Greenpeace entre los 10 principales supermercados reveló que estaban produciendo 1.100 millones de bolsas de plástico de un solo uso, 1.200 millones de bolsas de plástico para frutas y verduras y 958 millones de «bolsas reutilizables de por vida» al año.

El estudio de Plymouth indica que en 2010 se calcula que se comercializaron 98.600 millones de bolsas de plástico en el mercado de la UE y que desde entonces se han comercializado alrededor de 100.000 millones de bolsas de plástico adicionales cada año.

La concienciación sobre el problema de la contaminación plástica y el impacto sobre el medio ambiente ha dado lugar a un aumento de las opciones denominadas biodegradables y compostables.

La investigación dice que algunos de estos productos se comercializan junto con declaraciones que indican que pueden «reciclarse en la naturaleza mucho más rápido que el plástico ordinario» o «alternativas vegetales al plástico».

Sin embargo, Napper señaló que los resultados mostraron que no se puede confiar en que ninguna de las bolsas muestre un deterioro sustancial en un periodo de tres años en todos los entornos. «Por lo tanto, no está claro que las formulaciones oxo-biodegradables o biodegradables proporcionen tasas de deterioro suficientemente avanzadas para ser ventajosas en el contexto de la reducción de la basura marina, en comparación con las bolsas convencionales», encontró la investigación.

La investigación demostró que la forma en que se desechaban las bolsas compostables era importante. Deben biodegradarse en un proceso de compostaje controlado mediante la acción de microorganismos naturales. Pero el informe decía que esto requería un flujo de residuos dedicado a los residuos compostables, algo que el Reino Unido no tiene.

Vegware, que produjo la bolsa de compostaje utilizada en la investigación, dijo que el estudio fue un recordatorio oportuno de que ningún material era mágico, y que sólo podía ser reciclado en sus instalaciones correctas.

«Es importante entender las diferencias entre términos como compostable, biodegradable y (oxo-)-degradable», dijo un vocero. «Desechar un producto en el medio ambiente sigue siendo basura, compostable o de otro tipo. Enterrar no es compostar. Los materiales compostables pueden compostar con cinco condiciones clave: microbios, oxígeno, humedad, calor y tiempo».

Se compararon cinco tipos diferentes de bolsas de plástico. Éstas incluían dos tipos de bolsas oxo-biodegradables, una bolsa biodegradable, una bolsa compostable y una bolsa de polietileno de alta densidad – una bolsa de plástico convencional.